Día 18 – Confiados en Dios

Desde que somos niños nos enseñan a ser desconfiados y esto nuestros padres nos lo sembraron para protegernos. Nos enseñaron a no confiar en extraños, a no confiar en la gente, en casos mas extremos hubo padres que enseñaron a sus hijos a no confiar en nadie. En fin el asunto es que fuimos entrenados a no confiar y esto fácilmente se puede manifestar cuando hablamos de nuestra confianza en Dios, porque de la misma manera en que hemos aprendido a no confiar en nadie, se nos puede hacer igual de fácil no confiar en Dios, especialmente si las cosas no nos están yendo como esperábamos. Pero el desarrollar una desconfianza en Dios, o el no confiar totalmente en Dios puede ser peligroso, ya que la limitación de confianza en Dios se traduce a falta de fe.

En estos momentos es que la oración es mas efectiva, porque la oración nos impulsa a confiar en Dios y depender de Dios y no de nuestro entendimiento, razonamiento o fuerzas. Y esta es la mejor manera de vivir no solo la fe, sino de vivir nuestra vida.

Lea y medite en esta Escritura:

Proverbios 3: 5 – 7 ¨Confía en el Señor con todo tu corazón; no dependas de tu propio entendimiento. Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te mostrará cuál camino tomar. No te dejes impresionar por tu propia sabiduría.  En cambio, teme al Señor y aléjate del mal.

Escriba en su cuaderno de oración:

¿Que le dijo Dios?

¿Que le dijo usted a Dios? o ¿Que compromiso hizo con Dios?

Ore con esto en mente:

Ore en este momento para que Dios restaure, fortalezca y afirme nuestra confianza en El, que si estamos pasando por un momento difícil en nuestra vida, podamos movernos de duda a confianza, pero si no estamos atravesando por un momento difícil que podamos desarrollar la fe para poder confiar en Dios en esos días difíciles que enfrentaremos.

Write a comment:

*

Your email address will not be published.

Síganos: